Hay algo en lo que he estado meditando desde hace un
tiempo, algo que veo con mucha frecuencia y en lo que, confieso avergonzado, yo
también he participado. Me refiero a una guerra, y no una guerra espiritual
contra Satanás, como se nos advierte en las escrituras; tampoco una guerra
literal como la que vemos en las noticias sobre el medio oriente, es una guerra
entre cristianos, sí, personas que confesamos servir a Cristo.
Hay varios tipos de doctrinas que rigen la vida y
creencias de todos nosotros, a eso se le llama DENOMINACIÓN. Independientemente
de lo que creas perteneces a una denominación. No puedes decir "Yo sólo
creo en Cristo", sencillamente perteneces a una ramificación del
cristianismo o no eres cristiano.