Hoy en día, la
mayoría de la gente dice que el matrimonio es de dos y que por lo tanto los dos
deben poner por igual y tienen los mismos derechos y responsabilidades. Pero
Bíblicamente eso no es verdad.
En el Pacto del
Matrimonio según el diseño bíblico, cada uno tiene derechos, deberes y
responsabilidades diferentes que deben entender y vivir para que se cumpla el
propósito del mismo.
Desde el principio
de la creación, Dios le asignó al hombre la autoridad y la responsabilidad de
gobernar sobre todas las cosas de la tierra; pero también en el ámbito familiar el hombre tiene asignaciones o responsabilidades que cumplir.
A continuación mencionaré algunas que son muy importantes, veamos:
A continuación mencionaré algunas que son muy importantes, veamos:
RESPONSABILIDADES
DEL HOMBRE
1. Líder Espiritual
“Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos
hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres,
cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya
tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová”.
Josué 24:15
El hombre es el
responsable por el desarrollo espiritual, individual y emocional de su familia.
Es el que marca las pautas espirituales. Debe llevar a su familia a la iglesia
y velar por el crecimiento espiritual de cada uno de ellos. Cuando el hombre
empieza a tomar su posición como Líder Espiritual, esto hace que la mujer se
sienta segura y entonces ella puede respetarlo y admirarlo, y cumplir mejor su
función de esposa.
2. Líder del Hogar
“que gobierne bien su casa, que
tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad”.
1 Timoteo 3:4
El líder del hogar
es el que tiene la autoridad y la responsabilidad en el hogar. Es el encargado de que las cosas marchen bien. Si un hogar marcha mal es porque el
líder (hombre) no está ejerciendo su función de líder correctamente. Líder es
el que guía, dirige y enseña; no el que empuja para que se hagan las cosas. El
líder imparte y da amor incondicional.
El Líder del hogar
dirige de tres maneras:
a)
Con Autoridad: Dios le ha dado autoridad para guiar a su familia.
b)
Con Instrucción: Instruye en todo a su esposa e hijos.
c)
Con Ejemplo: Modela con su propio comportamiento.
Hay una gran
escasez de hombres espirituales, en nuestra sociedad. En la mayoría de los
casos, las mujeres son las que llevan la carga espiritual del hogar; y muchas
veces la emocional y algunos casos hasta la económica. Esto no debe ser así. La
mayor parte de los problemas matrimoniales ocurren justamente porque el hombre
no está ejerciendo su función como líder de su hogar.
3.
Nutridor Emocional
“Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas
sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más
frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras
oraciones no tengan estorbo”.
1 Pedro
3:7
El papel del
nutridor es apoyar, levantar, animar a los miembros de su familia. Por cuanto
las mujeres son más sensibles y emocionales, son más susceptibles a los
problemas de la vida. El hombre debe ser un sólido soporte emocional siempre,
más aún en momentos de crisis, de enfermedad, de tristeza, de dolor, de angustia,
etc.
La mujer necesita
ese apoyo emocional constantemente, pero en forma especial durante el periodo
de la menstruación, durante el embarazo y después del mismo, en la menopausia y
también en momentos de dolor por la pérdida de algún ser querido. El hombre
necesita crecer espiritualmente para adquirir la capacidad de darle
soporte emocional a su esposa sin herirla, sino más bien animándola con
palabras de afirmación, con oración, y con acciones que le den seguridad y la hagan sentirse amada.
Las palabras de
afirmación y el orar por y con la esposa, es como el abono y el riego que
hacen de una planta dar una preciosa flor. Cuando una mujer recibe ese cuidado
de su esposo, ella se muestra contenta, animada y su tez se torna brillante y
llena de colores hermosos, como la flor que es cuidada por su jardinero con
esmero y esfuerzo. Lo mejor del asunto es que al fin y al cabo quien va a
disfrutar de esa mujer llena de vida es él mismo.
4. Proveedor
El que provee las
necesidades materiales de la familia. “El que no provee para los suyos,
y sobre todo para los de su propia casa, ha negado la fe y es peor que un
incrédulo”. 1 Timoteo 5:8
Para ser un buen
proveedor tiene que ser un buen trabajador. Dios no bendice a vagos.
Para que Dios
bendiga como proveedor se debe:
Tener el deseo de
trabajar. “Lo que el
malvado teme, eso le ocurre lo que el justo desea, eso
recibe”. Proverbios 10:24
Hacer el esfuerzo. “»Esfuérzate y sé valiente, porque tú harás que este pueblo herede la tierra que les prometí a
sus antepasados”. Josué 1:6
5. Protector
Uno que protege a
su familia física y espiritualmente. El hombre que es protector apoya a su
familia en momentos de crisis, lucha por sus hijos para darles mejor educación.
El hombre como protector es el que trae seguridad a la familia pero no puede
hacerlo si él mismo tiene inseguridades. Hombres indecisos, inmaduros,
egoístas, mentirosos, no traen seguridad a la familia. Muchas veces el
hombre debe sanar su mente y su corazón para poder proteger a su familia.
UN MOMENTO PARA
MEDITAR
¿Cuáles
responsabilidades has cumplido bien y cuáles no?
¿Podrías hacer un
inventario acerca de tu rol como padre y esposo?
¿Crees que debes
hacer ajustes en tu papel como esposo y líder del hogar?
De acuerdo a como
desempeñas tu papel en el hogar ¿tu esposa e hijos te consideran un ejemplo a
seguir?
Cada hombre fue
hecho por Dios para desarrollar y cultivar todo lo que sale de Él. Si el hombre
hace su trabajo efectivamente, su esposa brillará cada día más como una mujer
virtuosa, porque a medida que pasa el tiempo, el hombre la va cultivando para
entregársela a sí mismo y disfrutarla como Dios planeó que fuera. Igualmente
sus hijos serán cultivados para que lleguen a ser hombres y mujeres de bien.
¡Dios te bendiga!