Parece a diario que hubiera un plan bien organizado del mundo
entero contra las mujeres solteras. Es una presión que ejerce el entorno de
manera continua y desgastante. Como si ser soltera se tratara de una enfermedad
terminal o de un estado imposible de aceptar.
Si
bien esta situación también se da con los hombres, generalmente se ve mucho más
en el caso de las mujeres y es por eso que hablaremos más sobre ellas.
¿Qué sucede dentro de la iglesia?
Pasa exactamente lo mismo,
resulta ser que en vez de dejar que a Su tiempo el Señor le muestre a
cada joven la persona que tiene reservada para ella, ciertos hermanos o
hermanas cercanos (incluyendo líderes) comienzan a decirle cierto tipo de cosas
intentando poner su atención en alguien en especial o en convencerla de que ya
es hora de encontrar a alguien con quien compartir su vida. Y es justo allí
donde la pesadilla comienza.
¿Por qué? Porque el corazón del hombre es engañoso y aunque
quizás en un primer momento la joven no quiera saber nada sobre el asunto, de a
poco su mente comienza a trabajar albergando pensamientos que divagan entre los
deseos ajenos y los propios. Al final termina siendo una lucha interna que a
veces se vuelve insoportable porque ahora todo se trata de eso y ya apenas
puede pensar en otra cosa.
Entonces ya no es un hermano más de la iglesia el que le
señalaron sino una potencial pareja, por lo que inconscientemente el
comportamiento hacia esa persona comienza a cambiar: hay nervios de por medio,
la relación se pone tensa, aparecen las preguntas internas como: ¿Estará bien
que le diga tal cosa o que haga tal otra?, ¿Qué pensará si me ve haciendo esto?,
¿Me malentenderá si le digo que?… Y así se vuelve una bola de pensamientos y,
emocionalmente, otra de sentimientos encontrados porque por un lado están
quienes quieren verme con pareja y me presionan y por el otro estoy yo que por
el momento no quiero saber nada pero a la vez me gustaría porque ya la mayoría
de mis amigas tienen novio e incluso ya están comprometidas o casadas y yo aquí
“que la vida se me pasa y estoy sola”.
Hay momentos en que resistes ante la presión pero llega un
momento en el que sin darte cuenta empiezas a ceder. Y entonces también
comienzan los miedos, “que si no le doy una oportunidad a ese joven quizás no
haya otro que me quiera”, “¿y si nunca encuentro a la persona indicada para mí?”,
“¿será que también me está esperando o estará con alguien más?”, “¿dónde estará
que no lo veo?”. Quien le da cabida a esos pensamientos vive en un estado de
ansiedad muy fuerte que termina desenfocándola de lo que realmente importa.
El sabio mandato del apóstol Pablo aplica muy bien a esta
situación. “No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la
renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios,
buena, agradable y perfecta.” Romanos 12:2
Si no te esfuerzas por vivir en el Espíritu muy difícilmente podrás
combatir estos ataques que la sociedad (incluyendo la iglesia) te lanza a
diario. Las vanidades de este mundo pueden llegar a consumirte si no tienes la
mirada fija en el Señor. Recién una vez que permites obrar al Espíritu Santo en
tu mente a través de su Palabra es que podrás comprender cuál es la perfecta
voluntad de Dios para tu vida. Y te puedo asegurar que muy pocas personas te
dirán que esperes el perfecto tiempo de Dios para ti en este aspecto porque la
mayoría no tiene esto en cuenta, sólo hacen con sus vidas lo que ellos quieren
pues no han transformado sus mentes para que sean renovadas a la imagen de
Cristo.
Cuando una mujer no está interesada en tener pareja es
porque tiene metas claras que se ha fijado y por lo tanto, en ese momento para
ella no es prioridad empezar una relación de ese tipo. Su seguridad no se apoya
en tener a alguien a su lado sino en desarrollarse como persona, ya sea
académica, laboral o espiritualmente.
Por esta razón, cuando la familia o amigos no entienden el pensamiento de la joven se vuelve muy incómodo para ella lidiar con esta situación. Se siente incomprendida porque los demás sólo están interesados en verla con novio y luego casada, cuando claramente dice la Biblia que HAY UN TIEMPO PARA TODO, una persona no tiene por qué estar siempre en pareja si no quiere, es su decisión personal y por ende merece respeto.
Y aquí un punto sobresaliente: La cuestión fundamental en la vida de una persona no radica en el hecho de si está casada o no, o si tiene pareja o no. Lo más importante es su compromiso con el Señor, que la ama y está plenamente concentrado en el proyecto de tornarla una persona realizada y feliz, sea cual fuera su estado civil.
Si conoces a alguien en esta situación ayúdala en vez de presionarla, ponte en su lugar. Recuerda que hay un tiempo para todo, lo cual no incluye las imposiciones de grupo.
Por esta razón, cuando la familia o amigos no entienden el pensamiento de la joven se vuelve muy incómodo para ella lidiar con esta situación. Se siente incomprendida porque los demás sólo están interesados en verla con novio y luego casada, cuando claramente dice la Biblia que HAY UN TIEMPO PARA TODO, una persona no tiene por qué estar siempre en pareja si no quiere, es su decisión personal y por ende merece respeto.
Y aquí un punto sobresaliente: La cuestión fundamental en la vida de una persona no radica en el hecho de si está casada o no, o si tiene pareja o no. Lo más importante es su compromiso con el Señor, que la ama y está plenamente concentrado en el proyecto de tornarla una persona realizada y feliz, sea cual fuera su estado civil.
Si conoces a alguien en esta situación ayúdala en vez de presionarla, ponte en su lugar. Recuerda que hay un tiempo para todo, lo cual no incluye las imposiciones de grupo.
Si estás siendo víctima de esta situación pregúntate ¿Cuál es
el apuro si es mejor que todo surja espontáneamente? ¿Tiene algo de malo que la
situación se dé cuando deba ser, cuando menos lo esperes, que de repente te
sorprenda? ¿O lo harás sólo por tener una noticia que contar que fulanita tiene
novio?
¿Te das cuenta de lo superficial del asunto? Que sólo se
trata de estar en boca de todos por unos días, recibir cientos de likes y
felicitaciones por las redes y que mientras ellos quedan conformes (porque ya
eres parte del club), tú eres una infeliz quién sabe si por el resto de tu existencia
(digo infeliz porque al final la decisión no nació de ti, tan sólo cediste a la
presión) ¿Le pondrás atención a algo tan pasajero que puede echar por tierra
todo lo que Dios tiene para tu vida? Si sueñas con sentir mariposas en el
estómago al conocer a alguien como lo has soñado ¿Por qué desplazar tus sueños
para cumplir los de otros?
Lo peor del caso es que a causa de ese tipo de presiones
muchas jóvenes terminan tomando decisiones equivocadas de las que luego se
arrepienten toda la vida porque ya no hay vuelta atrás. Por eso, tú joven que
me lees, ¡SÉ
SABIA! No te dejes llevar por ese tipo de cosas que no es más que
vanidad, intentos del mismo enemigo por arruinarte la vida.
La sensualidad que se mueve en ese ambiente es terriblemente
peligrosa porque si te dejas llevar por ella terminarás en cualquier lugar
menos en el que el Señor diseñó para ti. ¡Vamos! No te desesperes, si has
esperado hasta aquí de la mano de Dios y todo te ha salido bien, entonces
puedes esperar más. ¡NO TE IMPACIENTES!
Por último te regalo estos versos que escribió el salmista y
rey David sobre la impaciencia:
“Deléitate asimismo en Jehová, y
él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda
a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará. Exhibirá tu justicia
como la luz, Y tu derecho como el mediodía. Guarda
silencio ante Jehová, Y ESPERA EN ÉL. NO TE ALTERES CON
MOTIVO DEL QUE PROSPERA EN SU CAMINO…”
Salmos 37:4-7b
¡Dios te bendiga!
¡Dios te bendiga!