La semana pasada iniciamos un estudio sobre el mensaje de nuestro Señor Jesucristo a las 7 iglesias de Asia y analizamos la Iglesia de Éfeso y la Iglesia de Esmirna y a través de ellas aprendimos que debemos volver al primer amor (el amor por Cristo y sus obras) y mantenernos allí y que debemos sufrir por la causa de Cristo valorando y enfocándonos en las riquezas celestiales por encima de las terrenales. Esta vez le toca el turno a la Iglesia de Pérgamo ¿Que nos dice el Señor a la iglesia del siglo XXI a través del mensaje a Pérgamo? Veamos:
»Escribe al ángel de la Iglesia en Pérgamo: "...El que tiene la espada
aguda de dos filos dice esto: «...Yo conozco tus obras y donde habitas: donde
está el trono de Satanás. Pero retienes mi nombre y no has negado mi fe ni aún
en los días en que Antipas, mi testigo fiel, fue muerto entre vosotros, donde
habita Satanás. Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que retienes ahí a los
que retienen la doctrina de los nicolaitas, la que yo aborrezco. Por tanto,
arrepiéntete, pues si no vendré pronto hasta ti y pelearé contra ellos con la
espada de mi boca. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las
iglesias. Al vencedor le daré de comer del maná escondido y le daré una
piedrecita blanca y en la piedrecita un nombre nuevo escrito, el cual nadie
conoce sino el que lo recibe...." (Apocalipsis 2:12-17)
Elogio: Eran personas osadas y fieles que mantenían la fe de Cristo y no se callaban ante la intimidación.
Apelativo: La iglesia transigente o acomodada.
Critica: La Iglesia de
Pérgamo toleraba las inmoralidades, la idolatría y las herejías.
Instrucción: Arrepiéntete.
Recompensa: El maná
escondido y una piedrecita blanca con un nombre nuevo.
¿Qué dice la historia de la ciudad de Pérgamo?
La ciudad de Pérgamo 264 años A.C llegó a ser ampliamente conocida y ostentosamente ornamentada Capital del reino pergamino perteneciente a Macedonia provincia en poder del imperio griego. En el 133 A.C esta ciudad se integra al Imperio Romano. Algunas cosas se destacan para hacerla notable, entre ellas sobresalen: la famosa biblioteca con más de 250 mil rollos de pergamino — que a propósito, esta palabra se deriva precisamente de Pérgamo — A pesar de que para el tiempo del apóstol Juan ya no existía, no obstante, las ciencias y las artes estaban aún en pleno apogeo. También era famosa esta ciudad, sobre todo por su Templo a Escolapio y su Gran Altar a Zeus.
Además la ciudad era la residencia oficial del
Procurador Romano y la sede de la adoración imperial al Cesar como Dios. En
esta ciudad se encontraba un Templo dedicado a una diosa llamada 'Roma', en el
cual se le debía rendir culto al Emperador Romano.
La palabra Pérgamo significa: 'fortaleza elevada', y a tono con el significado se encontraban las fortalezas de las tinieblas. Por un lado la adoración al Cesar, por el otro, las activas fuerzas de los promotores del Culto a la Salud en los Templos de Escolapio; que en la mitología griega se le considera el dios de la medicina y cuyo símbolo es un bastón enroscado por la serpiente, el cual hasta hoy día es el símbolo de la medicina. La serpiente para los cristianos representa a Satanás. Aunado a todo ello, además, estaba al culto a Zeus como el dios sol ó también conocido como el culto babilónico al sol. Estas eran las condiciones en las que la iglesia de Pérgamo sobrevivía.
Es significativo como el Señor de la iglesia de Pérgamo se presenta como: El que tiene la espada aguda de dos filos. Conociendo profundamente el problema en su raíz se propone a resolver la amenazante situación en la iglesia de Pérgamo. La Biblia dice:
"...porque la palabra de Dios es tan viva y eficaz....mas cortante que toda espada de dos filos; que penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos...discierne los pensamientos y las intenciones del corazón... (Hebreos 4:12)
Dios irrumpe en el escenario de aquella iglesia comprometida con la cultura del Imperio Romano, con un solo propósito acabar con las mezclas. El Señor le dice a la iglesia de Pérgamo: "...Yo sé donde moras..." vengo a derrumbar tu fortaleza elevada con la Autoridad de mi Palabra: "...he aquí os doy autoridad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo poder del enemigo..."(Lucas 10:18-19).
Esta espada aguda es nada menos que ¡la palabra de Dios! esta palabra convence, juzga, separa y nos guarda de cualquier mezcla peligrosa. La Biblia nos dice que con esta misma espada El Cristo de Dios va a venir a juzgar a todas esas naciones anticristianas: “.... y de su boca sale una espada aguda..." (Apocalipsis 19:15-21). Pero también con esta misma espada pondrá fin al Anticristo.
¿Puedes discernir lo que el Señor quiere advertir a tu vida?
Debemos de concientizarnos del hecho que, estas cartas son las últimas palabras directas de nuestro Señor Jesucristo que nos quedan. A pesar de que los mensajes desde el cielo sean breves y sustanciosos en cuanto a su contenido, no se trata de una forma resumida de ellos. Son para aquellos "...a quienes han alcanzado los fines de los siglos..." (1 Corintios 10:11). Es a través de estas cartas que el Señor Jesucristo le habla directamente hoy a su iglesia del siglo XXI. Es por esta razón que debemos prestar mucha atención a cada palabra, orar sobre ella y preguntar al considerarla: ¿Señor mi Dios, que me quieres decir con esto? No solo para Pérgamo se revela el Señor con una aguda espada de dos filos que sale de su boca, sino también en el curso de toda la historia de la salvación, hasta el día de hoy.
El Señor elogia también a la iglesia de Pérgamo. Porque él es justo y no se olvida de nada: "yo sé donde moras, donde está el trono de Satanás...” Dios conocía que la iglesia estaba viviendo en la esfera del poder de Satanás. El Señor sabe exactamente donde tu vives, el conoce el poder de las circunstancias malignas y el ambiente infestado de demonios, sabe exactamente las circunstancias en las cuales te encuentras, que vecinos tienes, como es tu familia y tu lugar de trabajo. El sabe de las cosas que amenazan quitarte tu paz con Dios.
"...pero retienes mi nombre..." esta es la alabanza para los cristianos fieles de Pérgamo, que no permitieron que sus ojos fuesen cegados por la pompa pagana del culto a la serpiente y la adoración al Emperador en el mismo centro de la estrategia satánica. Ellos comprobaron una fe autentica como la de Antipas un ejemplo de los fieles hasta la muerte. En Pérgamo les exigían a los cristianos que dejaran de apegarse al nombre de Jesucristo, porque Satanás moraba en esa ciudad.
¿Alguna vez pensó como seria despertar suponiendo que
ese día podría ser el último de su vida?
Los fieles de
Pérgamo habían permanecido firmes frente a amenazas externas poderosas
y "...no has negado mi fe..."
aún cuando Antipas fue ejecutado en su ciudad "...donde está el trono
de Satanás..." Sin embargo, su amenaza mayor no era externa. Era una
filosofía sutil entre ellos mismos, la cual Jesucristo identificó como 'la doctrina
de Balaán'.
La mayoría de las personas recuerda a Balaán como el
personaje frustrado del AT que fue reprendido por un asno (Números 22:21-35).
Pero la historia de Balaán sigue registrando un engaño que amenazaba con
destruir al pueblo de Dios aun cuando estaban a punto de entrar a la Tierra
Prometida. Cuando Dios no permitió que el falso profeta maldijese a Israel,
Balaán utilizó otra estrategia. Se dio cuenta de que, si no podía maldecir a
aquél pueblo tal vez sí lo podía corromper. El profeta evadió la autoridad del
mandato de Dios, aconsejando al Rey de Moab que hiciese que sus mujeres
invitaran a los varones israelitas a sus fiestas paganas.
¿Qué podría haber de malo en participar de la cultura
local?
El vinculo se hizo cada vez más fuerte ¿cómo? Mediante relaciones sexuales inmorales y al poco tiempo los varones de Israel estaban proponiendo matrimonio a las mujeres de Moab. Todo este triste suceso se registra en Números 25;31:16. Entre estos cristianos de Pérgamo había unos pocos que habían abrazado una peligrosa doctrina que legalizaba una vida sexual que había sido prohibida anteriormente. Bajo el pretexto de “libertad”, estaban quedando esclavizados. Así se tergiversó la doctrina de la gracia de tal manera que la libertad se convirtió en libertinaje.
Esa doctrina provocó un reclamo de parte del Señor,
puesto que su práctica conducía a la idolatría espiritual y a una relación
ilícita entre la iglesia y el mundo. Un pueblo que había sido fuerte ante la
persecución, ahora estaba cediendo sin darse cuenta, a las tentaciones de su
cultura. Transigentes frente a las amenazas seductoras externas, descuidaron su
propio carácter, su estirpe de ¡Linaje Escogido!
Cristo declaró que si no se arrepentían los miembros
de esta iglesia de Pérgamo, tomaría el asunto en sus manos y vendría contra
ellos en juicio; a pelear contra aquellos que sostenían esas malas doctrinas.
Toda la iglesia de Pérgamo sería considerada responsable de los males
ocasionados por aquellos que se habían desviado del camino recto, albergando tales
herejías. La promesa de Jesucristo a los vencedores es:"...Al vencedor
le daré a comer del maná...y le daré una piedrecita blanca y en la piedrecita
un nombre nuevo escrito, el cual nadie conoce sino el que lo recibe... (Apocalipsis 2:17).
Al vencedor se le promete que comerá del maná oculto y también recibirá la aprobación del Señor en forma de una piedrecita blanca, en la cual habrá un nombre nuevo y precioso, todo ello sin duda, representan bendiciones espirituales que nos están reservadas para el futuro no muy lejano, cuando los santos serán recompensados. La Biblia dice que Jesucristo es el Pan Vivo...que descendió del cielo...el que come de este pan vivirá para siempre... (Juan 6:51) Y también dice que Cristo es la piedra fundamental del ángulo (1 Pedro 2:6).
Esta promesa hecha a los vencedores abarca la más
intima comunión con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. Podemos decir
con el Señor: "... le daré a comer del maná escondido... y habiéndole
hecho participar de mi hospitalidad, mi intimidad, reconociéndole como mi
huésped y amigo le regalaré una piedrecita blanca y en ella un nombre nuevo
escrito, el cual ninguno conoce sino aquél que lo recibe..."
El siervo de Dios John Wesley dijo: "... Jacob
después de su victoria, ganó el nuevo nombre de Israel. ¿Quieres tu saber cuál
será tu nuevo nombre? es muy fácil: ¡Vence! Mientras no hayas vencido, serán vanas
todas tus averiguaciones. Entonces y solo hasta entonces lo leerás... en la
piedrecita blanca...
¡Dios te bendiga!
